Soy un profesional multidisciplinar. Técnico especialista en Informática de gestión y certificado en Administración de Bases de datos. Digamos que la informática ha sido mi profesión durante muchos años y lo sigue siendo hoy en día. Pero siempre he tenido inquietud por todo lo relacionado con la creatividad, el deporte y con aprender cosas nuevas.
Por ese motivo, tuve un negocio relacionado con el sector de la moda urbana durante más de 8 años, en el cual pude conocer lo que se «cocía» en el diseño gráfico y en la moda urbana profesional.
Me apasiona el deporte, la música negra, principalmente el RAP del cual edité un disco en español el año 2006, y sigo en activo. Me considero animalista, me gusta el expresionismo abstracto del que he hecho algún pinito en este campo. Además, considero imprescindible formarse durante toda la vida.
Esta inquietud me llevó a estudiar el grado de diseño gráfico y creación digital en la UOC y cuya aspiración después de finalizarlo es dedicarme a ayudar a las empresas y particulares en el proceso de creación de una marca de zapatillas y ropa urbana, centrándome en el diseño de la identidad corporativa, el diseño de producto y el diseño audiovisual.
Esta capacidad multidisciplinar me permite desarrollar proyectos altamente creativos con dotes de gestión y liderazgo con la misión de facilitar la interacción de disciplinas diversas con la finalidad de lograr la excelencia a lo largo de la vida de la marca. Cuidando además de alcanzar la eficiencia y eficacia en la gestión del proceso y los recursos humanos que intervienen, y siendo respetuoso con el medio ambiente.
Os presento este portafolio con la idea inicial de compartir los trabajos que he realizado y estoy realizando con el objetivo de que podáis ver cómo puedo ayudaros a impulsar o crear desde cero una marca propia.
«Pienso firmemente que como diseñadores somos co-responsables de los procesos de exclusión cuando diseñamos productos que favorecen la exclusión social y el maltrato animal. Por lo tanto, somos indiscutiblemente también parte activa de la solución. En definitiva el diseño debe aportar calidad de vida a los consumidores del mismo y provocar cambios disruptivos que mejoren la vida de todos los seres vivos del planeta. «
Kiko García Colacios